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Desde las doce de la noche el día 8 se iniciaba con la salutación a la Virgen que llenó el templo de la Asunción y Ángeles en las primeras horas del día grande de la Sierra. Ya por la mañana tuvo lugar la función principal que presidió el párroco y arcipreste José Antonio Jiménez Cabello, concelebrando los párrocos de la ciudad, Francisco Delgado Alonso y Manuel Rodríguez Adame, junto con el emérito de san Francisco y san Rodrigo, Francisco Ramírez Chamizo. El diácono egabrense Ángel Jesús Maíz Tejero fue el encargado de predicar en esta jornada en la que el Centro Filarmónico Egabrense dirigido por José Pulido Rojano, interpretó la parte musical acompañado al órgano por Manuel Molina Carrillo. Entre las representaciones habituales este año también se encontraba la de la Real Archicofradía de María Santísima de Araceli. Apenas terminó la función, comenzaba la misa de la Bandera que, con su sabor popular, llenó de nuevo el templo jubilar de la Asunción y Ángeles.
Y así se fue sucediendo una jornada en la que el tiempo se presentaba inestable, hasta el punto que los responsables de la Real Archicofradía decidieron aplazar la procesión por la lluvia que hizo acto de presencia. Finalmente, una hora después de lo previsto, todo fue posible y las andas de plata que cobijan a la Madre, Patrona y Alcaldesa perpetua de Cabra, salieron a la calle a hombros de sus costaleros ante el clamor popular que dio muestras de gran fervor y devoción, no solo por parte de egabrenses sino de personas devotas llegadas de toda la comarca y de otros puntos distantes de la geografía.
Tras los emotivos actos del Centro Filarmónico Egabrense y del Ayuntamiento, donde la Salve Popular fue cantada por Lidia Jiménez Roldán acompañada al violín de Ángel Moreno Millán, con la flauta travesera por Carmen Cantero Ruiz y con el piano por Alfonso Fernández Pérez-Aranda, la Virgen llegaba a la Plaza Vieja. Tras la colección de fuegos artificiales un pequeño incidente retrasó la subida a la parroquia al producirse un incendio en una casa de la calle Tinte resuelto sin incidentes a destacar. Seguidamente se daba por finalizada la procesión, y los costaleros llevaron a la Virgen de la Sierra por la calle Mayor hasta su templo de la Asunción, donde permanecerá este mes recibiendo el cariño de tantas personas devotas y de diversas entidades que celebrarán actos en su honor.
Durante estos días y hasta el 17 tendrá lugar la novena que le dedica la Real Archicofradía. Los tres primeros días de la novena serán predicados por el vicario de la campiña, D. David Aguilera Malagón, y cantado por los coros de la Parroquia de los Remedios, la coral San Juan Pablo II y el coro parroquial de la Asunción y Ángeles. Comienza cada día a las 20 horas con la eucaristía, continuando con la exposición del Santísimo, Santo Rosario, ejercicio de la Novena, bendición y reserva.
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