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Han sido treinta y tres días los que la Virgen de la Sierra ha estado entre su pueblo, en la parroquia de la Asunción y Ángeles, donde ha recibido el fervor y la devoción de toda una comarca. Se han sucedido numerosos actos de culto y veneración a la Virgen María, a través esta antiquísima imagen milagrosa de Nuestra Señora de la Sierra.
A las 6 de la mañana se ha celebrado la misa de despedida en la Asunción, presidida por el pregonero de las fiestas de este año, José Antonio Tejero Cárdenas y concelebrada por los párrocos de la Asunción, José Antonio Jiménez Cabello y de los Remedios y Santo Domingo, Francisco Delgado Alonso. En torno a las siete de la mañana la Virgen iniciaba el camino de vuelta a su histórico santuario, enclavado en el Picacho de la sierra de Cabra. Los organizadores de la subida pedían a las numerosas personas congregadas en el templo jubilar de la Asunción y Ángeles, que permitieran a los costaleros una marcha más ligera para el discurrir por la ciudad.
Y así, en apenas media hora, la Virgen ha sido despedida a los sones del himno nacional en la Plaza de la Diputación por la Banda de Música de Cabra, continuando por la Avenida de Andalucía con la oscuridad de una madrugada llena de emociones, recuerdos y nostalgia, pero también con la satisfacción de haber vivido un mes de septiembre lleno de gracia y bendición con la imagen de la Virgen entre nosotros.
La llegada a la parroquia de San Francisco y San Rodrigo, entre numerosas personas congregadas junto a la Virgen, se llenaba de las primeras luces del alba y a las 8:20, terminada la salve, el alcalde Fernando Priego, retiraba la vara de alcaldesa perpetua. Y de nuevo el caminar de la Virgen de la Sierra en sus andas de viaje volvía a retomar la calle para llegar, con más adelanto horario que de costumbre, hasta el antiguo paso a nivel - actual Vía Verde - donde ya se inicia el camino a la Sierra y se ponen los cordeles para subir al Santuario, mientras la Virgen se vuelve al hospital. En torno a las 10:15 la Virgen estaba ya en la Viñuela y mientras la Sierra se iba llenando de devotos que esperaban a la Celestial Viajera. Finalmente a eso de las 11 la Virgen era recibida solemnemente en su Santuario ante la presencia de numerosas personas que se han congregado en este soleado domingo de octubre para - tras la celebración de la misa de acción de gracias, presidida por el consiliario de la archicofradía y rector del santuario, José Antonio Jiménez - celebrar una jornada de convivencia. Los costaleros de la Virgen de la Sierra y hermandad de san Rodrigo han celebrado su 46ª romería del costalero.
Un nutrido grupo de jinetes y caballistas acompañan a la Divina Serrana en su subida que ha resultado más multitudinaria que en otros años y en la que el ritmo más rápido impuesto a la comitiva, ha hecho que sean muchas las personas que han acompañado hasta los "cordeles", así como en el camino a la Sierra.
La Virgen ha subido con un manto que estrenó en 2011 en tonos blanco y salmón, de sedas valencianas. 700 varas de nardos de las huertas de Cabra en las esquinas de sus andas de viaje, cuatro coronas en el templete y un centro de flores blancas completaban el aspecto precioso que ha llevado en esta subida la "Palomita de la Cueva".
Desde La Opinión Cofrade queremos felicitar a nuestros colegas de los medios, especialmente a Radio Atalaya y a Atalaya Televisión por llevar durante todo el mes las retransmisiones de los actos celebrados durante la estancia de la Virgen en Cabra y también, en esta jornada de la subida que han permitido a numerosas personas vivir en directo y en redifusiones, todos estos emotivos momentos.
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