Toda la actualidad local de Cabra y comarca continuamente actualizada. Interesantísmos artículos de opinión y colaboraciones. Mantente siempre informado con: www.laopiniondecabra.com

Síguenos en:

Facebook

Twitter

Youtube

Livestream

Hemeroteca (1912-1989)

Hemeroteca (2002-2005)

Fundación "Aguilar y Eslava"

viviendo junto a ti el
Jueves Santo 2024

Revista de actualidad cofrade editada por La Opinión de Cabra   |   DIARIO FUNDADO EN 1912   |   I.S.S.N.: 1695-6834

laopinioncofrade.com

jueves, 28 de marzo de 2024 - 14:08 h

Pregón a San Rodrigo, mártir

Asunción y Ángeles y Demonios (IV-V)

Una vida disoluta conduce a la perdición eterna

25.09.19 - Escrito por: Demetrio Fernández, obispo de Córdoba

Recibimos la incitación permanente a "vivir bien", entendiendo por ello una vida regalada en la que no nos falte de nada y en la que estén satisfechas todas nuestras apetencias.

Nos lo dice el mundo de nuestro entorno, nos lo pide el cuerpo, y nos lo sugiere de una u otra manera el mismo demonio. Y por esa vida optó el personaje del relato evangélico de este domingo, Epulón el rico (Lc 16,19-31). Vestía refinadamente y banqueteaba a diario, se daba a la buena vida. A su lado estaba el pobre Lázaro, enfermo y hambriento, que ni siquiera podía saciarse de lo que le sobrada al rico.

La primera desgracia del rico Epulón es la de plantear la vida para disfrutar de todos sus placeres. Y los placeres de esta vida se acaban antes o después, no son eternos. De ello tendremos que dar cuenta ante Dios. Y la otra desgracia de Epulón es la de haber cerrado su corazón a las necesidades de los pobres de su entorno, no había percibido la pobreza de Lázaro, y eso que lo tenía a la puerta de su casa. Se había ido estrechando cada vez más su capacidad de amar.

La vida que continúa después de la muerte pone las cosas en su sitio, y a la luz de esa última realidad hemos de vivir la vida presente. Sucedió que ambos murieron y Lázaro fue a gozar de Dios para siempre, mientras que Epulón sufrió los tormentos que él mismo se había fraguado en su vida terrena. Porque el infierno no es castigo independiente de esta vida terrena. El infierno consiste en no poder amar. El corazón humano que está hecho para amar y ser amado se encuentra con que se le han cerrado todas las posibilidades, y ese será su tormento eterno, no poder amar aunque quiera y no poder ser amado por nadie.

Varias lecciones nos da Jesús con esta parábola. En primer lugar, que la vida no es para disfrutarla sin medida. Estamos hechos para la felicidad, sí; pero no para esa vida sensual, que nos va disolviendo en vez de construirnos. Pasarlo bien, disfrutar de los placeres de este mundo, darse la "buena vida" no conduce a nada bueno, además de que crea adicciones insaciables. Al contrario, nos va cerrando el corazón y no va haciendo incapaces de amar. Por el contrario, las penas de cada día aceptadas con humildad y ofrecidas con amor, nos ensanchan el corazón y nos hacen capaces de disfrutar ya desde ahora de la felicidad que Dios nos tiene preparada y que nunca acaba.

Y en segundo lugar, una vida disoluta nos hace desentendernos de los demás. Sólo piensa en sí mismo, no le conmueven las necesidades de los demás, se hace insolidario. Si el rico Epulón hubiera abierto los ojos a los pobres de su entorno, hubiera detenido su mala marcha mucho antes. El contacto con los pobres nos abre a la verdad de nosotros mismos, los pobres nos evangelizan al recordarnos que nosotros también somos necesitados y al ponernos delante de los ojos personas y situaciones que nos conmueven y nos sacan de nuestros esquemas. Compartir las penas de los demás nos hace más humanos, más solidarios, nos hace bien al sacarnos de nuestro egoísmo.

Pobres y ricos. No están en el mundo para contraponerlos, ni para enfrentarlos, ni para enzarzar a unos contra otros en lucha dialéctica tan frecuente en nuestro tiempo. El mundo no se arregla por la vía del enfrentamiento, del odio o de la lucha de clases. Lo único que renovará el mundo es el amor. Acercarse a los pobres es un imperativo del amor cristiano.

Jesucristo siendo rico se ha hecho pobre para enriquecernos con su pobreza (cf 2Co 8,9), y lo ha hecho por amor. Ese camino nuevo, que Jesús ha inaugurado, nos invita a recorrerlo con él, el camino del amor, que se acerca a los pobres en actitud de humildad y despojamiento para servirlos. Cuánto bien nos hacen los pobres, si no los miramos como rivales o desde arriba, sino abajándonos como ha hecho nuestro Señor. El acercamiento a los pobres nos abre el horizonte de la vida eterna, la cerrazón a los pobres nos lleva a la perdición.

Recibid mi afecto y mi bendición:
Demetrio Fernández, obispo de Córdoba


más artículos

Asunción y Ángeles y Demonios (IV-V)

07.03.24 | Flavia Borghese

Asunción y Ángeles y Demonios (III)

22.02.24 | Flavia Borghese

Asunción y Ángeles y Demonios (II)

17.02.24 | Flavia Borghese

Asunción y Ángeles y demonios (I)

15.02.24 | Flavia Borghese

La Virgen del Rosario de los Dominicos ¿obra de Pablo de Rojas?

27.10.23 | Antonio R. Jiménez-Montes

El «Varón de Dolores» de la iglesia de las Escolapias

13.08.23 | Antonio R. Jiménez-Montes

LXXV aniversario de la Coronación Canónica de María Santísima de Araceli

12.01.23 | Redacción

Salutación a la Virgen de la Sierra

08.09.22 - SALUTACIÓN | Isidoro Lama Esquinas

Mujeres de Iglesia piden voz y voto

05.03.22 | Mujeres y Teología de Cabra

Carta semanal del Obispo

27.02.22 | Demetrio Fernández, obispo de Córdoba

Secciones

Webs amigas

laopiniondecabra.com | actualidad local
Meteocabra.es | el tiempo
Patio de Cuadrillas | actualidad taurina
Poesía Taurina | decenario de versos táuricos

Sobre "La Opinión"

Quiénes Somos
Redacción
Hemeroteca (1912-1989)
Hemeroteca (2002-2005)
Contacto

Sobre la Fundación

Quiénes Somos
I.E.S. "Aguilar y Eslava"
Museo "Aguilar y Eslava"
El Hombre de la Sábana Santa
La Opinión de Cabra
Coro de Cámara

Aviso legal

Condiciones de uso
Política de privacidad

Síguenos también en:    • Facebook    • Twitter    • Youtube    • Livestream