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La Cruz de Aguilar
20.01.21 - Escrito por: Antonio Ramón Jiménez Montes
Lo de la Cruz de Aguilar de la Frontera no hay por donde cogerlo. Lamentable y sinsentido que hayamos tenido que asistir a algo que va en contra de la coherencia política, del respeto a las creencias o, cuando menos, del decoro que han de mostrar nuestros representantes públicos en sus decisiones y actuaciones.
No conozco a fondo el expediente que se haya podido preparar desde la administración correspondiente y por tanto si se ha llevado a cabo cumpliendo la legislación que le fuera aplicable o si se ha realizado dentro de las normas establecidas en las leyes sobre las actuaciones municipales. Ya en 2018 se pedía su retirada por la Asociación de Patrimonio Aguilarense, con una recogida de firmas de las que tampoco consta el número de apoyos recibidos o contrarios. Y las explicaciones que se han dado, o al menos las que hemos visto publicadas en prensa, aluden a la Ley de Memoria Democrática o las instrucciones de Patrimonio recibidas, sin que se tenga certeza de que haya una justificación adecuada de la actuación o si es correcto el procedimiento seguido.
Incluso habíamos visto una actuación de oficio del Defensor del Pueblo Andaluz sobre asuntos relacionados con la eliminación de elementos aún no retirados, contrarios a la Ley de Memoria Histórica de Andalucía en la provincia de Córdoba, que hizo pública la página del Defensor del Pueblo Andaluz el 4 de enero de 2021 y que suponemos no habrá sido respondida por las instituciones a las que iba dirigida (Ayuntamientos en los municipios de más de 20.000 habitantes y Diputación en los de menos).
Así las cosas, las imágenes que se han hecho públicas son de todo punto irrespetuosas y faltas de la más mínima tolerancia en relación a los símbolos religiosos. Porque eso es lo que se ha retirado y llevado al vertedero: uno de los símbolos religiosos que aglutina a más personas en todo el mundo por sus creencias y tradiciones cristianas: la Cruz. No olvidemos que en el último informe publicado, una de cada tres personas en el mundo profesa el cristianismo. Eso son 2.500 millones de cristianos (de los cuales 1.225 millones son católicos), que representan un 33% de la población mundial, por delante de los musulmanes, que aglutinan el 23%.
La destrucción de la Cruz de Aguilar, que no tenía inscripción ni lema alguno, tendría que haber respondido a un expediente ordinario en el que se hubieran planteado todas las connotaciones legales, administrativas o técnicas que cualquier actuación, pero más aún las públicas, requiere. Y parece que no se han cumplido evitando diálogo, acuerdo, conciliación y obviando trámite de alegaciones.
Una manera de actuar que, a todas luces, raya en un comportamiento injusto que ha sido tomado con una diligencia y urgencia que sorprende a propios y extraños, sin que se sepa muy bien cuál sea el fondo de la cuestión. Incluso puede que los empleados municipales que han actuado en el asunto se hayan visto compelidos a llevar a cabo tan infausta tarea.
En no pocas ocasiones nos vemos en la necesidad de llamar la atención sobre determinadas actuaciones que, cuando menos, son cuestionables; máxime si necesitan de unos trámites o autorizaciones que se exigen por parte de nuestras normas. No siempre se comprende y menos aún se suele responder. Y si se ajusta a Derecho, incluso cabe la posibilidad de manifestar, desde el respeto, nuestro desacuerdo.
El caso de la Cruz de Aguilar no se queda atrás pues, junto a todas esas consideraciones legales o administrativas de las que nada sabemos, ha supuesto una grave falta de respeto hacia los símbolos religiosos de un pueblo como el nuestro, tan apegado a las tradiciones, a la Religiosidad Popular y a sacralizar los entornos con elementos religiosos, que conforman, también, la manera de ser de una gran mayoría de personas y localidades.
Hoy nos sentimos defraudados por una actuación pública que ha quitado una cruz de la puerta de un convento, donde, desde hace algún tiempo no tenía más connotación que la de representar el símbolo más genuino que, desde Constatino, identifica a los cristianos. Y ha terminado en un vertedero de escombros para más escarnio de buena parte de la ciudadanía. No hacía falta actuar así. Por respeto, por tolerancia, por cortesía...
Es verdad que más allá de los símbolos está la vivencia de la fe, la práctica de la caridad y el seguimiento evangélico en un tiempo, como el que nos toca vivir, difícil y complejo. Y que en nuestros entornos, en municipios como Aguilar de la Frontera, donde el sentimiento religioso está tan extendido y las cofradías, las romerías, las devociones son una de nuestras señas de identidad, como en buena parte de nuestra tierra, la cuestión parece aún más difícil de entender. Y desde luego que podría haberse resuelto de otra forma.
El papa Francisco decía que "la cruz es signo santo del amor de Dios y del Sacrificio de Jesús, y no debe ser reducida a un objeto supersticioso o joya ornamental" y recordamos también las palabras de Benedicto XVI cuando decía que "la Cruz, por todo lo que representa y también por el mensaje teológico que contiene, es escándalo y necedad" aludiendo a san Pablo en 1 Cor 1,18-23.
Esta misma mañana el papa Francisco en la Semana por la Unidad de los Cristianos, citando el Concilio Vaticano II, hizo presente los muchos elementos que se combaten en el propio interior del hombre, y afirmó que "la solución a las divisiones no es oponerse a alguien, porque la discordia genera otra discordia".
Finalmente, si es una decisión ajustada a Derecho, lo que se ha hecho con la cruz (tirarla al vertedero de obras) no es lo más adecuado puesto que podría haberse llevado al cementerio o haberse acordado un destino más digno y resptuoso con un símbolo tan importante a nivel religioso y popular.
No se si lo que se ha hecho está justificado y es legal, e insisto que a priori y sin más elementos que lo que hemos visto (que no es poco), me parece que no tiene por donde justificarse una actuación tan inadecuada como la que se ha llevado a cabo. La carta del párroco Pablo Lora es un buen ejemplo de lo contrario.
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