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Entre Baza y Guadix, la Virgen del Socorro
12.03.14 - Escrito por: Antonio R. Jiménez
 La complejidad de las atribuciones tiene, a veces, posibilidades de establecer comparaciones entre imágenes y estilos con la prevención de no caer en la temeridad de adjudicar categóricamente imágenes a autores sin que tengamos constancia documental. En los primeros años del siglo XX podemos leer en crónicas periodísticas o publicaciones sobre nuestras cofradías que cuando alguna imagen se consideraba de categoría, se atribuía a Montañés o a Mora.
Precisamente hoy nos acercamos a dos autores que forman parte de la escuela granadina. Y lo hacemos a través de la imagen de Ntra. Sra. del Socorro, esa "virgen de luto" egabrense que tiene una belleza cargada de idealismo devocional y expresivo, con la singularidad de lucir talladas sus ropas de noble viuda castellana y con atributos más castizos de las dolorosas hispánicas.
Durante mucho tiempo hemos escuchado que se trataba de una imagen del círculo de los Mora, con alguna que otra atribución al más destacado de esta familia, José de Mora (Baza 1642-Granada 1724). Sin embargo esta atribución es compleja. Al parecer no hay constancia documental en el archivo de la parroquia de la Asunción y Ángeles de nuestra ciudad que sitúe esta imagen en Cabra con anterioridad a 1780. En ese período había dos escultores de la escuela granadina en pleno apogeo: Diego de Mora, (Granada 1658-1729) y Torcuato Ruiz del Peral (Guadix 1708 - Granada 1773), considerado como uno de los artistas más interesantes del Tardobarroco español. El dato de los inventarios de la Asunción ha podido llevar a descartar a José de Mora como su autor y considerarla como obra de Ruiz del Peral, lo que pudimos ver en la exposición Andalucía Barroca. No obstante, el hecho de no figurar en Cabra alguna referencia con anterioridad a esa fecha, 1780, no quiere decir que la imagen no pudiera ser realizada por José de Mora.
Nos movemos pues en este escenario para aproximarnos a la autoría de esta imagen que comparamos con obras de estos tres artistas. Las características de la imagen en relación con otras cuya autoría no está cuestionada o consta documentalmente, son ciertamente encuadrables en alguno de ellos, José de Mora, su hermano Diego o también Ruiz del Peral.
En sus rasgos lo único que llama la atención es quizá lo lineal de las cejas que podemos ver también en imágenes incuestionadas de José de Mora. Otro de los elementos destacados en este busto es precisamente la indumentaria. Hemos hablado de ella como la "virgen de luto" por su relación con este tipo de vestidos de las dolorosas y aquí está el dato que podría inclinar la balanza hacia José de Mora por su cercanía con esta manera de vestir a la Virgen, que conoció en el Madrid de los Austrias, siendo escultor de cámara de Carlos II y permaneciendo en la corte hasta 1680. Y tres de sus más destacadas obras están vestidas a este modo de la Soledad de Gaspar Becerra de Madrid, como son la Soledad de Santa Ana (Granada); una dolorosa que se conserva en el Museo de Bellas Artes de Granada y otra en el de Valladolid, junto a otras similares como la de la Puebla de Don Fadrique (Granada) o la del Convento de las Maravillas de Madrid. Todas ellas tienen estas similitudes: son bustos, están vestidas al modo de la Virgen de Luto y tienen sus cejas muy lineales. La comparamos también con la Virgen de las Angustias de la Catedral de Jaén o la Virgen de los Dolores de Osuna, con rasgos también muy cercanos.
Nada más podemos comentar pues en este caso, nuestra intención es plantear este parecido más que razonable para acercarnos a una atribución en torno a José de Mora; aunque sin descartar la de Ruiz del Peral.
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