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Santo Tomás de Villanueva y las Agustinas de Cabra
10.10.19 - Escrito por: Antonio Ramón Jiménez Montes
El 10 de octubre es la fiesta de santo Tomás de Villanueva, que fue arzobispo de Valencia y uno de los frailes agustinos más venerados tras ser proclamado santo. Su relación con Cabra viene a través del monasterio de Agustinas Recoletas desde que llegaron a nuestra ciudad en 1697.
En el retablo de la iglesia de Nuestra Señora de las Angustias, del monasterio de las Agustinas Recoletas de Cabra, podemos ver una imagen de Santo Tomás de Villanueva que se venera en una de las hornacinas laterales (la de la sacristía) al lado del tabernáculo eucarístico bajo la Virgen de las Angustias. Al otro lado del retablo en la hornaciana cercana al coro de las monjas, está la imagen de María Magdalena penitente. Se trata de una imagen en la que el santo viste el hábito agustino y está arrodillado sobre una nube lo que da idea de glorificación y santidad. Esta postura es semejante a la que tiene la Magdalena que empareja su posición iconográfica. Entre los elementos que identifican su condición, además del hábito y correa agustina, podemos ver a sus pies la mitra, en su mano el báculo y en el pecho el palio que representan su dignidad episcopal como arzobispo.
Según consta en los documentos que conserva el monasterio, la imagen se colocó en el retablo mayor el día 13 de marzo de 1761 y la imagen se atribuye según el manuscrito de hechos notables de las Agustinas, al "escultor de la ziudad de Lucena Pedro de Mena", como recoge en su libro el profesor Antonio Moreno Hurtado.
Entre las curiosidades que vinculan también al santo con la comunidad agustina egabrense se sitúa el origen de las primeras religiosas que llegan desde Granada a Cabra en el año 1697. En efecto consta la salida de la ciudad de la Alhambra de seis agustinas: "tres del convento del Corpus Christi y tres de convento de Santo Tomás de Villanueva". Y así, en aquel mes de noviembre de 1697 las religiosas madre Andrea del Santísimo Sacramento, por subpriora; madre Laura de Santa María, por tornera y madre Cecilia de Santa Teresa, por provisora, las tres "tomasas" (así conocidas las agustinas del Albaicín granadino) que salieron para fundar el monasterio de agustinas en Cabra, procedentes del convento de Santo Tomás de Villanueva de Granada.
En el calendario litúrgico podemos leer lo siguiente en este 10 de octubre, considerado fiesta para la orden de san Agustín y en la ciudad de Valencia, y memoria libre para el resto.
En este día recordamos a Santo Tomás de Villanueva, que fue un verdadero modelo de buen pastor, sobresaliendo por su caridad, pobreza, prudencia y celo apostólico. Nace en 1486, estudió en la Universidad de Alcalá de la que, más tarde, fue maestro preclaro. Aunque era religioso de la Orden de Ermitaños de San Agustín, aceptó por obediencia el episcopado, siendo nombrado Arzobispo de Valencia. Fue un verdadero modelo de buen pastor para todos. Sobresale, entre todas las virtudes pastorales, por un encendido amor hacia los pobres hasta entregarles todos los bienes, incluida la propia cama. Murió el 8 de septiembre de 1555 siendo canonizado el año 1658.
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